Muchas personas descubren que añadir una manta con peso a su rutina de sueño les ayuda a reducir el estrés y a fomentar la calma. Al igual que un abrazo o envolver a un bebé, la suave presión de una manta con peso puede ayudar a aliviar los síntomas y mejorar el sueño de las personas con insomnio, ansiedad o autismo.
¿Qué es una manta ponderada?
Las mantas con peso están diseñadas para ser más pesadas que las mantas normales. Existen dos estilos: de punto y de estilo edredón. Las mantas con peso de estilo edredón añaden peso con cuentas de plástico o vidrio, rodamientos de bolas u otro relleno pesado, mientras que las mantas de punto se tejen con hilo denso.
Se puede usar una manta con peso en la cama, en el sofá o en cualquier lugar donde desee relajarse.
Beneficios de las mantas ponderadas
Las mantas con peso se inspiran en una técnica terapéutica llamada estimulación de presión profunda, que utiliza una presión firme y controlada para inducir una sensación de calma. Usar una manta con peso puede tener beneficios subjetivos y objetivos para el sueño.
Proporcionar comodidad y seguridad
Se dice que las mantas con peso funcionan de la misma manera que un envoltorio apretado ayuda a los recién nacidos a sentirse cómodos y abrigados. Muchas personas encuentran que estas mantas les ayudan a conciliar el sueño más rápido, ya que les brindan una sensación de seguridad.
Alivia el estrés y calma la ansiedad
Una manta con peso puede ayudar a controlar el estrés y la ansiedad. Dado que el estrés y la ansiedad suelen interferir con el sueño, los beneficios de una manta con peso pueden traducirse en un mejor descanso para quienes sufren pensamientos estresantes.
Mejorar la calidad del sueño
Las mantas con peso utilizan estimulación por presión profunda, que se cree que estimula la producción de serotonina (una hormona que mejora el estado de ánimo), reduce la hormona del estrés (cortisol) y aumenta los niveles de melatonina, la hormona que ayuda a dormir. Esto puede ayudar a mejorar la calidad general del sueño.
Calma el sistema nervioso
Un sistema nervioso hiperactivo puede provocar ansiedad, hiperactividad, taquicardia y dificultad para respirar, lo cual no favorece el sueño. Al distribuir uniformemente el peso y la presión por todo el cuerpo, las mantas pesadas pueden calmar la respuesta de lucha o huida y activar el sistema nervioso parasimpático, que se relaja, preparándolo para dormir.
Aunque muchas personas reportan mejoras con estas populares mantas, existe debate sobre si las mantas con peso ofrecen todos los beneficios que afirman los fabricantes. Como con cualquier producto que presume de beneficios médicos, conviene proceder con cautela.
Cualquier persona que tenga problemas persistentes de sueño debe hablar con un médico, quien puede evaluar mejor su situación y determinar si una manta con peso podría ser una parte efectiva de un enfoque de tratamiento integral.
¿Quién puede beneficiarse del uso de una manta ponderada?
Las mantas pesadas ofrecen beneficios potenciales para todo tipo de personas que duermen, especialmente para quienes experimentan mucho estrés o padecen ciertas afecciones médicas. En particular, pueden brindar beneficios terapéuticos a personas con autismo, ansiedad, depresión y trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH).
Ansiedad y depresión
Muchas personas con ansiedad y depresión se encuentran atrapadas en un círculo vicioso. La ansiedad y la depresión pueden afectar negativamente el sueño y, a su vez, la falta de sueño agrava los síntomas de ansiedad y depresión. Los efectos calmantes de una manta con peso pueden ayudar a mejorar el sueño de las personas con estos trastornos de salud mental. Un estudio reveló que las mantas con peso ayudaron a reducir los síntomas de insomnio en personas con ansiedad, depresión, trastorno bipolar y TDAH.
Trastornos del espectro autista
Al activar el sentido del tacto, una manta con peso puede ayudar a las personas con trastornos del espectro autista a concentrarse en la presión profunda de la manta en lugar de en otros estímulos sensoriales del entorno. Esta presión puede brindarles comodidad y permitirles relajarse incluso en situaciones que pueden resultar sobreestimulantes. A pesar de la falta de investigaciones sobre sus beneficios objetivos para el sueño, los niños con autismo suelen preferir usar una manta con peso.
¿Son seguras las mantas pesadas?
Las mantas pesadas generalmente se consideran seguras, siempre que la persona que las usa tenga suficiente fuerza y destreza física para levantarlas cuando sea necesario para evitar asfixia o atrapamiento.
Algunas personas que duermen deberían tomar precauciones adicionales y consultar con su médico antes de usar una manta con peso. Una manta con peso puede no ser adecuada para personas con ciertas afecciones médicas, como problemas respiratorios o circulatorios crónicos, asma, presión arterial baja, diabetes tipo 2 y claustrofobia. Los expertos también recomiendan que las personas con apnea obstructiva del sueño (AOS) eviten usar mantas con peso, ya que el peso de una manta pesada puede restringir el flujo de aire.
Si bien existen algunas mantas pesadas diseñadas específicamente para niños, los bebés y los niños pequeños no deben usarlas ya que corren el riesgo de quedar atrapados debajo.
Cómo elegir la manta con peso adecuada
La mayoría de las personas prefieren una manta con peso equivalente a aproximadamente el 10% de su peso corporal, aunque debe considerar sus preferencias al buscar una. Las mantas con peso se venden en pesos que van desde 3 kg hasta 11 kg, y suelen venir en tamaños de cama estándar, como individual, matrimonial, queen y king. Algunos fabricantes también fabrican mantas con peso para niños o de viaje.
Las mantas pesadas son más caras que las mantas comunes, generalmente entre $100 y $300. Los modelos más caros suelen estar fabricados con materiales más duraderos y pueden ofrecer mayor transpirabilidad u otras características.
Hora de publicación: 21 de marzo de 2022