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A pesar de los beneficios demantas pesadasAún existen algunos conceptos erróneos sobre ellos. Abordemos los más comunes:

1. Las mantas pesadas son solo para personas con ansiedad o trastornos del procesamiento sensorial.
Mantas pesadasPueden ser beneficiosas para quienes sufren de ansiedad o insomnio, o simplemente desean sentirse más relajados. Si bien se suelen usar para ayudar a personas con ansiedad o trastornos del procesamiento sensorial, las mantas pesadas pueden ser útiles para quienes desean sentirse más relajados y tranquilos.

2. Las mantas pesadas son sólo para niños.
Si bien las mantas pesadas se usan a menudo con niños, también pueden ser beneficiosas para los adultos. Por ejemplo, unamanta ponderadaPuede ser una buena opción si usted lucha con un trastorno del desarrollo neurológico, un trastorno del sueño, ansiedad o simplemente quiere sentirse más relajado.

3. Las mantas pesadas son peligrosas.
Mantas pesadasNo son peligrosas. Sin embargo, es importante usarlas con seguridad. Asegúrese de seguir las instrucciones del fabricante y nunca use una manta con peso en un niño menor de 2 años. Si tiene alguna duda sobre el uso de una manta con peso, consulte a su médico antes de usarla.

4. Las mantas pesadas son caras.
Mantas pesadasEl precio puede variar, pero existen muchas opciones asequibles. Puedes encontrar mantas con peso a precios que se adaptan a todos los presupuestos. Sin embargo, es importante invertir en calidad, ya que a veces las mantas con peso más económicas pueden no cumplir con las especificaciones que prometen o estar fabricadas con materiales de baja calidad.

5. Las mantas pesadas son calientes e incómodas.
Mantas pesadasNo son calurosas ni incómodas. De hecho, muchas personas las encuentran muy acogedoras y relajantes. Si vives en un clima cálido, te conviene elegir una manta más ligera para no pasar demasiado calor al dormir. Una manta refrescante con peso también es una excelente opción.

6. Las mantas pesadas son pesadas y es difícil moverse con ellas.
Mantas pesadasSuelen pesar entre dos y quince kilos. Aunque son más pesadas que las mantas tradicionales, no son tan pesadas como para dificultar el movimiento. Simplemente elige una que tenga el peso adecuado para tu tamaño y comodidad. Si tienes dudas, consulta las reseñas y las políticas de devolución para asegurarte de que es la manta adecuada y poder devolverla si es necesario.

7. Te volverás dependiente de una manta con peso si la usas regularmente.
No hay evidencia que sugiera que usar una manta con peso cause dependencia. Sin embargo, si disfrutas de la sensación que te produce, quizás quieras usarla con regularidad.